- • El 51,3 % de los casos de cáncer de estómago se detecta en etapas avanzadas.
- • La endoscopia es un método diagnóstico fundamental para su prevención ya que permite detectar lesiones tempranas y factores de riesgo como la infección por Helicobacter Pylori que podrían pasar desapercibidos.
El cáncer de estómago, también conocido como cáncer gástrico, es el de mayor mortalidad en hombres y en mujeres en Colombia. Esta enfermedad, compleja y multifacética, surge cuando células malignas comienzan a desarrollarse a partir del tejido del estómago, un órgano esencial en nuestra digestión y bienestar.
Un factor de riesgo que aumenta la amenaza de esta condición es la presencia de la bacteria Helicobacter pylori. Esta bacteria, que reside en el organismo de aproximadamente el 80% de los colombianos, no solo favorece el desarrollo de gastritis crónica, sino que también está estrechamente vinculada con el riesgo de cáncer gástrico, especialmente en aquellos que tienen antecedentes familiares de esta enfermedad.
Uno de los desafíos más evidentes en este cáncer es su diagnóstico temprano: más del 51% de los casos se detectan en etapas avanzadas, específicamente en estadio IV, a una edad promedio de 65 años. Esta situación subraya la urgencia de promover la detección temprana y la prevención activa de esta enfermedad.
"El diagnóstico temprano puede marcar la diferencia en la calidad y sobrevida de pacientes con cáncer gástrico, así como en el acceso oportuno a tratamientos para el manejo de la enfermedad. No se trata solo de salvar vidas; sino un paso hacia una población más sana y consciente de la importancia de la prevención", destacó Carmela Oranges, directora médica de MSD para el Clúster de América del Norte.
Endoscopia: el aliado clave en la detección temprana del cáncer gástrico
La endoscopia ha demostrado ser una herramienta crucial para identificar el cáncer gástrico en sus primeras etapas. Este procedimiento mínimamente invasivo permite a los especialistas observar directamente el esófago, el estómago y el intestino delgado, facilitando la detección de posibles lesiones o cambios anormales en el tejido, como la displasia. Estas lesiones, si no se tratan a tiempo, pueden evolucionar hacia el cáncer.
"La endoscopia es fundamental para prevenir el cáncer gástrico, ya que permite identificar lesiones que pasarían desapercibidas. Es un procedimiento seguro que se realiza con sedación para la comodidad del paciente. No hay razón para temerle; al contrario, una endoscopia a tiempo puede cambiar radicalmente el curso de la enfermedad, el pronóstico y el acceso a terapias oportunas", enfatizó Oranges.
Beneficios de la endoscopia en la prevención del cáncer gástrico:
- 1. Prevención en personas de alto riesgo: Detección de lesiones premalignas y condiciones que aumentan el riesgo de cáncer gástrico como infección por Helicobacter pylori y anemia perniciosa. Estos pacientes pueden requerir endoscopias de control para evaluar la presencia de lesiones cancerosas.
- 2. Detección temprana: Cuando la endoscopia es realizada por profesionales expertos, se aumenta la posibilidad de detectar lesiones malignas tempranas.
- 3. Tratamiento temprano: Cuando se logran detectar lesiones malignas tempranas, el médico logra hacer resección de estas a través del endoscopio, disminuyendo significativamente el riesgo de muerte a futuro a través del tratamiento oportuno.
¿Cuándo realizarse una endoscopia?
Es importante que las personas con antecedentes familiares de cáncer gástrico o que presenten síntomas gastrointestinales de más de dos semanas de duración, tales como dolor estomacal, dificultad para tragar, vómito, pérdida de peso inexplicable, gastritis, entre otros, consulten a su médico de cabecera. El profesional podrá evaluar la necesidad de realizar una endoscopia u otra prueba diagnóstica para identificar la causa de estos síntomas y brindar el tratamiento adecuado.
“El diagnóstico oportuno no solo aumenta las posibilidades de éxito en el tratamiento del cáncer gástrico, sino que facilita el acceso a nuevas terapias innovadoras como la inmunoterapia que ofrecen un mejor control de la enfermedad y una mayor calidad de vida para los pacientes”, finalizó la vocera.
La alta mortalidad del cáncer de estómago en Colombia y el diagnóstico en etapas avanzadas nos obligan a actuar. Promover la prevención en personas de alto riesgo y fomentar hábitos saludables es fundamental para reducir la incidencia y la mortalidad de esta enfermedad en Colombia.
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